Sin duda al momento de realizar tu campaña o trabajo creativo, deberás lograr antes que nada visualizar la conducta que identificará al consumidor del mercado.
Verás por cierto que el consumidor selecciona publicidad. No será para nada raro esperar que el consumidor busque la manera de evitarla. Es lo que hoy en día produce el llamado efecto Zapping.
El consumidor espera de la publicidad información, entretenimiento y confianza. La información debe ser la necesaria y esencial para dar a conocer las características relevantes del producto, de modo que lo convenzan que fueron hecho para la vida del observador, pero sin aburrirlo.
Además, debes saber que el consumidor no es fiel a una sola marca y selecciona entre una variedad de otras marcas. Las investigaciones han demostrado que todo consumidor tiene un repertorio de marcas, cada una de las cuales puede ser regularmente intercambiable. Por lo tanto, nuestra primera misión como publicistas es integrar nuestra marca a esa "short list" mental del consumidor. Cualquier otra cosa será predicar en el desierto.
El consumidor busca información si el riesgo de compra es alto, y encuentra en la fidelidad la compra segura. La publicidad no debe defraudar al consumidor en esa búsqueda de información y argumentos que lo lleven a una decisión final de compra.