miércoles

La Intuición.

No es lo mismo un hombre que otro hombre.
No es lo mismo un rasta que un punk.
No es lo mismo un sensible que un insensible.
No es lo mismo un gordo que un flaco.
No es en absoluto lo mismo.

Un día te encuentras con un brief que dice : "Target global, todo el conjunto de la población nacional, excepto niños por debajo de los 10 años". Sales a la calle y te da miedo.

¿Quiénes son todas esas personas? No reconoces a nadie. Todos son anónimos, diferentes, distantes. Caminan en silencio.

Cierras tus ojos y piensas: " En el fondo son todos iguales, y yo soy igual a ellos", "Sigue tu instinto!" te dices.

Tu instinto te dice que a las mujeres le gustan las mujeres y por supuesto te equivocas. Tu instinto te dice "Es imposible que ese anuncio pueda gustarle a alguien" y te vuelves a equivocar. Tu instinto te dice " Intenta algo nuevo, distinto" y sigues por supuesto a tu instinto.

Tu instinto no es para nada infalible, pero es lo único seguro que tienes, y te aferras a él. Si confías en él, confías en ti, y creer en ti es lo que te da valor.

Por que el miedo es el peor enemigo del instinto. Lo adormece, lo encarcela, lo convierte en un mero fantasma de si mismo. Y lo contrario, en el lado opuesto, está el instinto que da miedo.

Éste es el mejor de los instintos. Por que te provoca, te reta, te incita a tener el valor de tomar caminos nuevos, nunca antes transitados. Y lo nuevo no tiene registro; si no tienes miedo para seguir el más audaz de tus instintos estarás más cerca de los que lideran este negocio.

No existen reglas para comunicarse con todos y cada uno. Las reglas de ahora, son viejas dentro de 5 minutos. Sólo está tu instinto reescribiéndolas cada día. Suerte.